Unitat Pastoral El Carme - Sant Joan

26 març 2013
Categoria/es: General

RECITAL POÈTIC MUSICAL DE SETMANA SANTA

La tarda del Diumenge de Rams l’església del Carme ha acollit el 14è Recital Poètic Musical de Setmana Santa, a càrrec de l’Agrupació Teatral TOAR. Després d’una primera part dedicada a la poesia catalana, i un intermedi musical a l’orgue pel mestre Lluis Climent, el grup de rapsodes i poetes han recitat poemes de Patrocinio Gil Sánchez.

El poeta alaves de Llodio és soci fundador del Grupo Literario Tétrada, ha publicat una dotzena de llibres de poesia i ha estat guardonat nombroses vegades en diferents premis d’arreu del país. Vinculat a Lleida des del seu pas com a funcionari de la Tresoreria de la Seguretat Social, és autor dels poemes que es llegeixen a la Catedral de Lleida el Diumenge de Rams en honor dels Portants i de la Confraria de LA SOMERETA.

Mari Cruz Nevot, que ha tingut cura de la direcció i selecció de textos del recital, ha glossat la figura humana i artística de Patrocinio Gil Sánchez, i n’ha destacat la humilitat i la fluïdesa expressiva de la ploma del seu cor. Alguns dels seus poemes han estat esplèndidament recitats per Mari Bometón, Denise Borraz, Cristina Guallar, Carmel Guallar, Marisol Lavín, Jordi Nicuesa, Mari Cruz Nevot i María Pijuan. El poeta homenatgeat ha rebut la insígnia del TOAR de mans del seu director, Enric Castells.

A continuació hi ha una poètica nota autobiogràfica de Patrocinio Gil Sánchez:

"Mientras me dejaba seducir por la niña pecosa de cabello rizado en escarola y ojos de caramelo, que apretaba a su pecho una muñeca de trapo con ojos de alfileres, me atrapó la poesía. La infancia hizo las calles de barro y sin jardines, la chopera y el río, los saltos a la comba, los atrases, el prado, aquel beso de azúcar que me diera Teresa donde los terraplenes cuando los doce años recién cumplidos nunca y ese soneto último de un adiós en el alba.

Lloré todas las lágrimas cuando los 15 años porque perdí sus besos, y perdí, para siempre, los cielos de sus ojos y su risa infinita. Le hice sí, malabares con todas las palabras impregnadas de lluvia con que escribí sus cartas con letra menudita y un te quiero en la firma enredado en estambres y charcos de la infancia. Luego me hice mayor y fui aprendiz de niño, de poeta y un poco de maestro, de volver los veranos a sus brazos de escarcha y a sus labios de blonda prendidos de amapolas y trigos en el llano y me fui haciendo surco, trino de gorriones, haz y parva, pamela, tomillo y luz de luna, un poco de sus pechos y esas raíces que duelen cuando se duerme el alma y sólo es una tumba con un ramo de flores y una maldita fecha.

Que por h o por b, uno ha tenido suerte, y en este arte difícil de juntar las palabras para que crezcan versos, me han dado algunos premios, como éste tan hermoso del pasado diciembre en los LVII Juegos Florales Sahuayenses, de Sahuayo (México) y, hasta me he permitido hacer algún relato que también ha gustado.

Y que eso es todo…"

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